El hogar continúa en marcha
Como ya sabéis, uno de los objetivos del Hogar del Compañero, el hogar de los mayores de Santa Irene, es que sea un lugar de encuentro y comunicación para todas las personas que participan en ese espacio.
Aunque la pandemia limitó muchos de nuestro movimientos y encuentros, el Hogar continuó con su proyecto. El Equipo de voluntarias del Hogar pusimos en marcha algunas propuestas para solucionar, en lo posible, la soledad y la tristeza que la pandemia trajo consigo: empezamos por replantear las aulas y los espacios; cambiamos algunas actividades y juegos de grupo por otras que se pudieran hacer con mayor seguridad y prevención; potenciamos las llamadas del Equipo “Cuenta Conmigo” a las personas que estaban solas en casa…
Estos meses hemos realizado actividades de costura, memorización, pintura, mandalas, gimnasia, juegos, seriaciones con gomet, etc. También hemos podido retomar salidas al teatro. Hace poco disfrutamos en el teatro Amaya de “El barbero de Sevilla”.
Con estas actividades hemos recuperado la alegría y la ilusión.
Fiesta del 8 de mayo
Esta alegría e ilusión retomada se ha ido transformando durante estos meses en perros de lana, en conejos porta lápices, en botes de dulces decorados, en muñecas de tela, en marca páginas, en collares… Y nos preguntamos ¿Qué hacemos con estos trabajos elaborados por los mayores? ¡Pues hagamos un mercadillo, como hacíamos antes! Además, seguro que los donativos que recibamos por el mercadillo nos ayudarán a realizar alguna salida al teatro, o de turismo.
¿Y si, además, como ya hicimos en Navidad, preparamos una obra de teatro y la representamos? Seguro que podemos contar con Analía, la querida vecina del barrio que se ofreció para ayudarnos este año en la preparación de las obras de teatro. Y así fue. ¿Y sobre qué preparamos la obra? ¿Por qué no recordamos nuestros tiempos en las casas bajas? ¿por qué no intentamos reflejar la armonía y las relaciones de ayuda que se vivían en las casas bajas? Éramos todos como familia y lo poníamos todo en común. Y así surgió el título de la obra: “NUESTRAS QUERIDAS CASAS BAJAS”.
Así que el día 8 de mayo invitamos a parroquianos, a los vecinos, familiares y amigos. Asistió mucha gente y fue un verdadero éxito. La obra salió muy bien y fue muy emotiva. ¡El grupo de teatro “lo dio todo”!
A la salida de la breve obra de teatro, la gente se animó a ver la exposición y el mercadillo que se habían organizado con los trabajos realizados por las personas mayores. Fue otro éxito. Desaparecieron casi todos los trabajos realizados. ¡Muchas gracias, vecinos!
Y como el tiempo nos acompañaba ¿qué mejor que terminar con una buena barbacoa y una sangría? Así que, en el patio de la Parroquia se convirtió en un gran patio de vecinos en el que nos esperaba una barbacoa con chorizos y panceta, riquísimos, así como una rica y fresquita sangría.
Fue una tarde donde disfrutamos de la convivencia, de los recuerdos y de la alegría de poder compartir.
